Este
miércoles, el presidente colombiano Juan Manuel Santos habló
con la prensa sobre las dificultades que la industria petrolera colombiana se
está enfrentando. Aunque expertos sobre la industria probablemente consideran
su admisión como obvio, el Presidente admitió
que “Va a ser difícil poder mantener la producción al millón de barriles (por
día).”
Agregó
que la caída en los precios globales del petróleo le ha tocado duro a Colombia,
explicando que “Las empresas que invierten y que producen petróleo lo primero
que hacen ante esa caída de los ingresos es recortar las inversiones, recortar
la sísmica y a eso tenemos que adaptarnos para tratar en la medida posible,
mantener la mayor producción posible.”
Juan
Carlos Echeverry, presidente de la petrolera estatal Ecopetrol, cree que
Colombia no debe abandonar la opción del uso de la fractura hidráulica como una
medida para mantener la producción petrolera por encima de 1 millón bpd. Argumentó
que Colombia no tiene el lujo de no usar el fracking para extraer todo el petróleo
que pueda.
Además
del problema de sus reservas demostradas, la industria petrolera colombiana
también sufre de los ataques contra su infraestructura por los grupos
guerrilleros en el país. Por fin, este martes Ecopetrol reactivó
el oleoducto Caño Limón, que estaba cerrado durante casi dos meses después de
varios atentados en junio, costándoles a Ecopetrol y su socio Occidental
Petroleum casi 60,000 bpd.
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