Un
enorme paro por casi un tercer del territorio del Perú se concluyó ayer, cuando
los protestantes salieron a las calles para apoyarles a sus compatriotas en la
provincia de Islay, quienes protestaron en las calles y paralizaron la región
durante más de dos meses para acabar con el proyecto minero Tía María. El paro
les obligó a las escuelas cerrar
en cuatro regiones por el Perú: Arequipa, Cusco, Puno, y Moquegua.
Un
protestante en Puno, Adolfo Choque, le dijo a Telesurtv,
“[La acción] se dio espontáneamente. Acá no tenemos líderes, pero todas las
organizaciones han salido para que armemos el paro esta vez. De esta manera
[les] apoyamos a todos nuestro hermanos en la provincia de Islay que están
defendiendo sus derechos y sus recursos naturales y quienes productos podrían
ser fuente de comida para toda la región de Puno.” La Oficina Regional para
Derechos Humanos de las Naciones Unidas pidió la desescalada de las tensiones
entre el gobierno peruano y las comunidades locales.
El Associated
Press habló con funcionarios locales en la ciudad de Arequipa, donde se
mandaron 2,000 policías en anticipación del paro. Los funcionarios locales
confirmaron que “no hubo ningún acto de violencia” en toda la ciudad durante el
paro.
Los Andes
publicó un editorial sobre el conflicto, poniéndolo en el contexto de la
industria minera contra los campesinos. El editorial admite que muchos peruanos
están frustrados en el presidente Ollanta Humala por no ser más firme contra
gente que ellos consideran no educados. Sin embargo, el editorial menciona que
los campesinos también solo están pensando en como ganarse la vida en el futuro
y están aprendiendo lecciones de lo que les paso a áreas parecidas en el Perú.
En una
noticia relacionada con el sector petrolero, Perú tiene planeado
abrir la licitación para la construcción de un oleoducto de gas natural para
aumentar las reservas en Lima.
No comments:
Post a Comment