La
industria petrolera colombiana, que durante mucho tiempo era el motor para el
crecimiento económico del país, se volvió sitiado por una multitud de
problemas. Las noticias cada día con peores, y desafortunadamente, parece que
el pueblo colombiano sería él que pierda más. La caída en el precio mundial del
petróleo ha creado una cascada de consecuencias para la industria petrolera
colombiana, las cuales muy cuales la sociedad colombiana sentirá muy
pronto.
Hemos
hablado mucho sobre el efecto que el bajo precio del petróleo tendrá sobre los
ingresos del gobierno colombiano. El Senado Colombiano acaba de aprobar
una ley diseñada para resolver este problema y subir los ingresos para el
gobierno colombiana por $25,500 mil millones de dólares durante los próximos
cuatro años. La ley aumentaría el porcentaje que gana el gobierno de la venta
de cada barril de petróleo, de un 70% a 75%. La ley también impondría un
impuesto adicional sobre grandes empresas con una alta rentabilidad. El sector
privado está indignado,
y la industria petrolera colombiana en particular sentirá los efectos de esta
ley.
Empresas
petroleras colombianas tienen planeado
bajar
su inversión en exploración en Colombia, aunque en el 2014, su inversión en
esta categoría fue mucho menos de lo esperado. Según Reuters,
en 2014, esto fue por las demoras en la aprobación de permisos y licencias medio
ambientales. Sin embargo, en el 2015, las petroleras no serán tan ansiosas para
recibir estos permisos.
Hemos
discutido mucho en estas páginas sobre la importancia para Colombia de invertir
en la exploración. Se estima que en 6.5 años, el país no tendría reservas de
petróleo, y sin un gran aumento en inversión para exploración, una gran fuente
de ingresos para el gobierno no existiría.
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