En el 2015, las dos historias principales para la industria minera peruana eran la lucha contra la minería ilegal en el país, y los conflictos sociales entre la industria minera formalizada y las comunidades locales. La semana pasada, el Ministerio de Economía y Finanzas decidió apostar el doble a su estratégia de formalizar la industria minera.
La MEF anunció que enviaría S/. 1.8 millones a seis regiones peruanas para financiar la formalización de los sectores mineros de estas regiones. Esta decisión demuestra que el gobierno peruano reconozca que la descentralización del sector minero del país debilitó las esfuerzas del gobierno central de formalizar la industria minera peruana. Varias regiones peruanas, el caso más famoso fue el de Madre de Dios, se unieron con sus mineros informales contra el gobierno central peruano. Sin embargo, con los fondos adicionales me imagino que los gobiernos regionales cambiarán de vista.
Según la Agencia Andina, el gobierno peruano llevó a cabo 100 operaciones contra la minería ilegal en todo el país en el 2015. La semana pasada, el gobierno reveló que se habían destruido 120 campamentos mineros ilegales en un asalto llamado "La Cumbrera 2015" en el departamento de Cusco. Esta vez, los mineros ilegales explotaron dinamita en un intento de prevenir la operación.
Los asaltos este año unieron funcionarios de varias agencias y departamentos del gobierno del país, y se implementaban con ritmo muy regular tras el año. El reporte de Andina no mencionó planes para el 2016.
Sin embargo, la industria minera peruana seguía muy atractiva para inversión extranjera. El valor total de los 47 proyectos mineros actuales suma $56.4 mil millones. De esta plata que se ha invertido en la industria minera peruana, empresas chinas han invertido más de un tercer.
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